El último lunes 30 de mayo, se llevó a cabo una nueva edición de Asonip Webinar. El ingeniero agroindustrial y consejero de propiedad intelectual Jesús Diestra realizó un conversatorio sobre la importancia de la información tecnológica para patentar. ¿Cuáles son las claves que un inventor debe tomar en cuenta en este aspecto? En este artículo, recopilamos 5 consejos cruciales para involucrarse en el mundo de las patentes.
1.- Conoce qué es lo que puedes y no puedes patentar: Tal y como expone Jesús Diestra en la charla, hay que tener en cuenta todo lo que, como inventores, podemos darles nuestra propia autoría. Procedimientos, herramientas, utensilios, máquinas, aparatos, sistemas, compuestos, moléculas o, incluso, composiciones químicas. De este modo, los inventores deben tener en claro esta lista para poder tener la certeza de que su producto o idea puede ser un objeto de valor a patentar. El ingeniero presenta el ejemplo de un remolque con sistema de desinfección para el transporte y entrega de productos, como un medio de transporte innovador que guarda un valor interesante que se patentó en su momento.
2.- Saber cuál es el fin de patentar un producto: cuando se han realizado investigaciones arduas, se han invertido horas de prácticas, se han consultado a expertos sobre una propia invención, se tiene que tener en cuenta que la patentabilidad no solo supone la proclamación de la autoría. Patentar un invento significa, en palabras de Jesús Diestra, la transición del desarrollo tecnológico al derecho exclusivo otorgado por el Estado para poder explotar el mismo. En ese sentido, se abre un abanico de posibilidades para poder mejorarlo, crear nuevos modelos, distribuirlo comercialmente, etc. Y todo ello nace de la ventaja competitiva brindada, porque el inventor o empresa manejan la exclusividad para la explotación comercial de dicha invención.
3.- Presentar la solicitud de patente a tiempo: ser puntual nunca pasa por desapercibido en el ámbito legal y en la patentabilidad es indispensable. En ese sentido, Jesús Diestra nos narra la importancia de determinar la fecha de presentación de la patente, debido a que los inventores tienen como máximo hasta el 6 de agosto para registrar su solicitud. Por ello, es esencial tener en cuenta el rango en el que se va a realizar, pues si se toman mucho tiempo para hacerlo, como Jesús alerta, diversos artículos científicos y nuevos proyectos pueden salir a la luz. Lo que significa un golpe duro para la negativa a la solicitud. Aquí, se mide y revisa el invento presentado con toda la información presentada antes de la fecha, lo que consiste en el estado de la técnica, según explica el consultor en propiedad intelectual.
4.- Ser conciso y directo en la solicitud de patente: está claro que al ser un proceso muy riguroso e importante para los autores de los inventos, se necesita una buena explicación. En ese caso, Jesús Diestra nos detalla cómo influye en el proceso de registro una buena y clara redacción al momento de presentar el documento técnico. Una concisa descripción, un resumen completo, las reivindicaciones y los dibujos del invento. Es así como se necesitan consultas con expertos para poder presentar de forma eficiente este registro, pues fallas ortográficas, generalidades o confusiones pueden costar alargar el proceso.
5.- Si trabajo en una empresa, ¿la patente es mía o del empleador?: patentar un producto también implica saber los detalles si es que yo estoy trabajando en una organización u empresa. Jesús Diestra nos explica que si una persona usa los recursos de la empresa (centros educativos, empresas, etc), el invento le pertenecería en principio a este último. Es por ello que muchas personas deciden iniciar las investigaciones desde su propia cuenta, con sus propios recursos, realizando sus propias investigaciones para poder patentar auténticamente sus inventos. Además, por estas mismas razones, se realizan las transferencias de patentes entre las partes involucradas o se reparten porcentajes de la misma.